La Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE) valora positivamente el avance que supondrá para la accesibilidad en autobuses a nivel mundial la aprobación de una modificación del reglamento para la homologación de estos medios de transportes y que ha contado con la colaboración de la organización.
Esta actualización ha sido posible gracias a una alianza liderada por Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), que inició el proceso en España implicando a COCEMFE y después logró involucrar a operadores, fabricantes, expertos y administraciones públicas de varios países europeos, así como a la Asociación Internacional de Transporte Público (UITP) y al Ministerio de Industria.
Finalmente, el Foro Mundial para la Armonización de la Reglamentación de Vehículos de Naciones Unidas ratificó el pasado viernes 14 de noviembre la Undécima Enmienda del Reglamento n.º 107, un hito histórico que mejorará la accesibilidad de los autobuses fabricados en todo el mundo.
La presidenta de TMB y primera teniente de alcaldía, Laia Bonet, ha asegurado que el nuevo reglamento “es el resultado de un éxito colectivo, nacido de la convicción profunda de que la accesibilidad no es un extra, no es una opción, ni una mejora puntual que se tenga que reivindicar vehículo a vehículo. Es un derecho y como derecho debe estar garantizado“. sentido, queremos poner en valor la perseverancia del equipo de accesibilidad y el equipo de ingeniería de bus de TMB”. Bonet ha destacado que los cambios incorporados ” son útiles, concretos y transformadores y contribuyen a hacer de Barcelona una de las ciudades más accesibles de Europa “, ha concluido.
“Este logro demuestra que la colaboración entre entidades sociales, operadores de transporte y administraciones públicas puede transformar la normativa internacional y mejorar la vida de millones de personas”, ha declarado Anxo Queiruga, presidente de COCEMFE, que ha añadido que “desde nuestro papel como representantes de las personas con discapacidad física y orgánica, hemos aportado la mirada de quienes más barreras encontramos, contribuyendo a que los autobuses del futuro sean realmente accesibles para todas las personas”
El trabajo comenzó en 2018, cuando TMB identificó diferencias significativas en la accesibilidad entre distintos modelos de autobús que, aun cumpliendo la normativa, ofrecían experiencias muy distintas para las personas usuarias.
En 2022, TMB y COCEMFE firmaron un convenio de colaboración y realizaron una auditoría técnica y social de la flota, cuyos resultados sirvieron de base para elaborar una propuesta de modificación del Reglamento 107. Con el respaldo del Ministerio de Industria, la iniciativa fue elevada a la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (UNECE) y adoptada por la UITP como un reto colectivo a nivel internacional.
A lo largo de 2024, se celebraron diferentes reuniones técnicas con la participación de gobiernos, fabricantes y operadores de transporte de Barcelona, Lisboa, París, Bruselas, Turín y Valonia, bajo el Grupo de Trabajo sobre Disposiciones Generales de Seguridad (GRSG).
El resultado fue un consenso sin precedentes en torno a 32 mejoras concretas en materia de accesibilidad, seguridad y usabilidad, que ya se han incorporado oficialmente al Reglamento 107.
Entre las principales novedades destacan:
- Una definición ampliada e inclusiva de “pasajero con movilidad reducida”, que reconoce un espectro más amplio y adopta un enfoque integral que abarca la discapacidad y diferentes situaciones permanentes o temporales.
- Una garantía de accesibilidad para acceder al pulsador de solicitud de rampa o elevador accesible también con las puertas abiertas, de manera que facilite el uso autónomo tanto en interior como exterior.
- Asientos prioritarios más accesibles, con apoyabrazos adaptados, agarre seguro y suelo a nivel del pasillo.
- Un refuerzo de la señalización y dispositivos de comunicación con alturas accesibles, unificación de criterios y garantías la legibilidad y comprensión de todos los elementos, incluyendo los referidos a espacios reservados.
- La mejora de la visibilidad y seguridad en el embarque estableciendo nuevas medidas máximas para el hueco lateral entre la rampa y la puerta para evitar atrapamientos o caídas en los laterales de la misma.
- Una mejor percepción del espacio que refuerza la seguridad en los elementos de accesibilidad, como rampas, botones de comunicación y elementos visuales de orientación.
- Reconocimiento y seguridad para perros de asistencia, garantizado un espacio mínimo que garantice su seguridad y comodidad durante el viaje.
A partir de esta ratificación, los fabricantes de autobuses deberán adaptar sus modelos a los nuevos requisitos técnicos, y la aplicación obligatoria se prevé a partir de 2026.
“Haber formado parte de este proceso, junto a TMB y otros actores internacionales, nos llena de orgullo y refuerza nuestra convicción de que la accesibilidad no es solo una cuestión técnica, sino de derechos humanos”, ha afirmado Queiruga, concluyendo que “seguiremos trabajando para que los avances normativos se traduzcan en entornos, servicios y vehículos verdaderamente accesibles y utilizables por todas las personas”.
















